A pesar de este bagaje, el argumento a priori no indica que The Twilight Pariah vaya a ser una historia para el recuerdo. Tres jóvenes de vacaciones se dedican a pasar el verano tomando cervezas antes de regresar a las clases. Una de las protagonistas, Maggie, es una curiosa de la arqueología que propone a sus dos amigos pasar unas cuantas noches excavando en el terreno de una casa abandonada en medio del bosque. ¿Qué puede salir mal? Evidentemente, todo. Palada a palada irán descubriendo objetos sin valor hasta que sacan a la luz un bote con un extraño liquido rojo y, todavía más importante, unos huesos que dan forma a un cadáver al que se le intuyen cuernos y rabo. Desenterrar esos restos traerá más consecuencias de las legales que, en un inicio, puedan venirnos a la mente, dado que pronto comienzan a tener lugar sucesos extraños que esconden un oscuro secreto, oculto durante casi un siglo.
Como decía anteriormente, no parece un argumento que vaya a marcar un antes y un después. Y, efectivamente, no lo hace. Sin embargo, a fuerza de ser sincero, The Twilight Pariah se lee de manera fluida dado que apenas cuenta con relleno que impida su lectura ágil. En mi caso, la he devorado en apenas dos buenas sentadas en el sofá. Ayuda cómo Ford introduce en la trama unos pocos personajes secundarios que añaden profundidad y detalle a unos protagonistas que, a pesar de ello, se hacen ciertamente planos.
La novela tiene un grave problema de tono que lastra toda la lectura. Quizá debí haberlo visto venir con el blurb impreso a la ilustración de cubierta. Lo que aparentemente se vende cono un relato de terror dispuesto a tenernos en tensión durante buena parte del mismo, en apenas un tercio de páginas se viene abajo convirtiéndose en una historia de humor adolescente americano. Las actuaciones y comentarios de los tres protagonistas cuando las situaciones comienzan a desencadenarse están fuera de lugar en una narración que se presuponía de terror. Y cuando, en el tramo final, Ford intenta arreglarlo incorporando un texto encontrado durante la investigación, es ya demasiado tarde para recomponer un relato carente de identidad. No queda más que tomarse un poco a broma muchos de los comentarios que se van sucediendo y alguna situación ante la que estás más pendiente del chascarrillo o gracia de turno que del susto o la imagen horrenda que cabrían esperar.
La frenética resolución no ayuda a mejorar la sensación de que, a pesar de la demostrada experiencia de Jeffrey Ford a la hora de dar forma a los textos,The Twilight Pariah es una novela que no termina de cuajar. El argumento peca de simple y el misterio es fácilmente identificable desde su primer tercio. Apenas puedo recomendarla para un rato que tengáis libre en algún viaje de tren o avión en el que necesitéis una lectura de género ligera e intrascendente.
The Twilight Pariah, de Jeffrey Ford
Tor Books, 2017
176 pp. eBook. 3,43€
Ficha en la web de la editorial
“….revisando sus últimas novedades descubrí que Ford es un experimentado escritor de relatos y novelas. Ante mi desconocimiento y sorpresa también me di cuenta que fue publicado en nuestro país en varias ocasiones gracias a Minotauro y la desaparecida La Factoría de Ideas, algo que me había pasado desapercibido”
Pues te recomiendo que pongas fin cuanto antes a este importante desconocimiento .Yo no he leído la novela que comentas, pero es un escritor que merece la pena. Puedes comenzar con los relatos que ha traducido Marcheto para su web “Cuentos para Algernon” y continuar con sus novelas La Fisignomía, Memoranda o El retrato de la señora Charbuque.
En base a los comentarios que me estáis haciendo, está claro que he comenzado a leer a Ford por el peor lugar. Me apunto tus recomendaciones para próximas lecturas. Gracias!